viernes, 23 de julio de 2010

Hacen falta más ideas


Parece los últimos apuntes sobre el movimiento empresarial segoviano ofrecen datos neutros con un matiz levemente positivo. Por un lado la AIHS comenta que la temporada turística ha empezado de manera irregular, afirma Cándido López que Junio ha sido bueno, pero que las previsiones para Julio son inciertas debido a la poca antelación con que se hacen las reservas en hostelería y al creciente cambio en los hábitos de consumo que hace que espaciemos y repartamos el gasto en lugar de concentrarlo en el periodo veraniego.

Por otra parte el barómetro de la ACS apunta a una mejora en las expectativas de ventas, y un 40% opina que se mantendrán o mejorarán, aunque no se prevea un aumento importante. Otro dato que puede ser revelador es que la inmensa mayoría, un 83% no ha solicitado financiación y prácticamente el mismo porcentaje, un 84.67%, mantendrá la plantilla. Y aunque bastantes tendrán que soportar contra márgenes la subida del IVA, consideran que ello no influirá sustancialmente en los volúmenes de negocio y que las rebajas tendrán un efecto que suavizará el impacto, aunque lo acentuará a posteriori. El barómetro apunta también que hay dos temas que los comerciantes consideran que pueden dar un impulso positivo si se materializan: el Palacio de Congresos y la Capitalidad Europea de Segovia 2016.

Bien haríamos en sopesar y analizar con detalle estos datos que, en general, concuerdan con lo que aprecio en el marco general de las empresas segovianas, porque pueden darnos importantes pistas sobre posibles vías innovadoras de incrementar el atractivo y con ello el volumen de negocio. Antes, me gustaría aportar que un número importante de pequeñas empresas, incluso con crisis de por medio, están manteniendo o incrementando su facturación y consiguen mantenerse bien posicionadas, a base de esfuerzo, mucho trabajo y replantearse continuamente las estrategias y, ciertamente, en sectores mucho más difíciles y agresivos que la hostelería y el comercio -que, dicho sea de paso, no suponen entre ambos las mayores cifras de negocio de la economía provincial-.

Las claves que rigen la demanda han cambiado sustancialmente y las estrategias clásicas no dan el mismo resultado. Tenemos, pues, que incorporar nuevas estrategias de negocio que tengan en cuenta las premisas que ahora rigen la relación de los clientes con nuestro sector de negocio y con sus hábitos de compra en general. Si por ejemplo, como afirma Cándido, en hostelería las reservas se hacen cada vez con menor anticipación, tendremos que adecuar la oferta y ser dinámicos en proponer alternativas que aprovechen que la toma de decisión se pospone, seguramente porque se busca algo más atractivo o novedoso que haga que se incline la balanza.

Si previsiblemente el fin de las rebajas traerá una caída de las ventas en comercio, planteemos estrategias durante las rebajas para conseguir que el Cliente siga acudiendo a nuestro comercio una vez acabadas, para la nueva temporada, con propuestas y ventajas que enganchen con su perfil de consumo. No se trata, como me comentaba ayer un conocido, de seguir rebajando o de recortar los precios. Dar más por lo mismo nos permitirá mantener nuestro nivel de precios y satisfacer las expectativas de nuestros compradores a través de estrategias no relacionadas sólo con el pricing .

Segovia, a pesar de los últimos recortes en infraestructuras, sigue estando en una posición de clara ventaja frente a otras ciudades de nuestro entorno y con un atractivo de primer orden. El verano y la multiplicidad de eventos incrementan sustancialmente nuestro atractivo y nos estamos consolidando como una ciudad y provincia en las que es fácil encontrar motivos para acudir, no sólo como asueto, también como oportunidad de negocio. Iniciativas sencillas que además estén ligadas a a infraestructura cultural como las propuestas gastronómicas o Vente al Fresco, se revelan como de enorme eficacia para este objetivo. Pero hay que segir trabajando para mantenerlo y mejorarlo.

Es el momento de generar nuevas ideas de negocio con propuestas que nos ayuden a enriquecer nuestra oferta y atractivo, que aprovechen los nichos que sí aprecian quienes vienen de fuera con otra visión y otras perspectivas y, no lo perdamos de vista, muy especialmente como conocedores de nuestras particularidades y del cliente provincial, de poner en marcha nuestra imaginación, mezclada con nuestra experiencia e intuición para aprovechar con pequeñas ideas bien pensadas, realistas e implementables, las oportunidades de posicionarnos, individual y colectivamente de una manera activa. Pero no olvidemos que estas ideas tienen que estar alineadas con nuestra estrategia y visión de negocio, dos aspectos que, visto lo visto, tenemos que replantearnos contínuamente.

martes, 13 de julio de 2010

La Roja destiñe y el beso de Casillas.

Ayer estaba mi vecina tendiendo la colada y me fijé en que las prendas más claras tenían un cierto tono rosa. "Es que mi marido metió anoche la camiseta de la Roja en la lavadora y ha desteñido", me dijo. "Ya ves, hasta la ropa se ha contagiado de la euforia del Mundial", añadió sonriente.

La verdad es que hay una sensación general de que ya nos hacía falta algo que nos elevara la moral y pudiéramos hablar algo más allá del "que mal está todo ¿verdad?", que intercalamos en casi todas las conversaciones desde hace ni se sabe, que ni siquiera la meteorología tan proclive a comentarios que estamos teniendo últimamente nos vale ya de muletilla. Estos días, entre las repeticiones de los momentos del partido, el antes, el después, la llegada de la Selección y demás titulares, se intercalaban los comentarios sobre si la economía mejoraría o el PIB subiría el 0,7 por mil.

Soy simplemente escéptico acerca de los efectos reales que este acontecimiento tendrá en la economía o las cifras del paro o de su repercusión sobre la política española y los conflictos autonómicos. ¿Influirá algo?. Seguramente, porque como muy bien saben los de marketing, la selección es un gancho publicitario de inigualable valía. Además del efecto puntual y el aumento de ventas en determinados negocios, ha habido y habrá campañas, promociones y patrocinios; algunas empresas que así lo publicitaron nos devolverán el importe gastado (ojo a los detalles, pero algo es algo) y habrá una parte del movimiento de negocio que sin duda se aprovechará del tirón e intentará mantener el momento angular de esta sana euforia.

Sin embargo, yo apuesto que el efecto más importante y duradero va a ser lo que un amigo definió acertadamente el domingo como el chute emocional. La inteligente campaña de Cuatro TV "Podemos" es un ejemplo de utilización inteligente en forma de motivación colectiva que no apela a los bajos instintos de la furia española (que además hace referencia a un episodio histórico bastante poco edificante) sino al trabajo de un grupo trabajador, cohesionado, y seguro de sí mismo que, ante la adversidad, tiene la virtud de persistir. Y que se muestran naturales y dejan ver ese lado personal, que es capaz de conectar emocionalmente por igual a mujeres y hombres como el espontáneo beso de Casillas.

La imagen de España en el mundo (y también dentro de España) ha sufrido inevitablemente un importante cambio. De pronto todo el mundo se ha dado cuenta de que hay españoles en la primera línea de casi todo, además del deporte: ciencia, negocios, empresas, instituciones... No sólo la imagen de España va a subir muchos enteros, además se actualizará esa foto fija de sol, playa y pandereta, por la de de una nación moderna que lucha por estar en los puestos de cabeza saliendo de la crisis. De pronto las camisetas rojas que se han visto por todo el mundo empezarán a teñir de rojo muchas coladas y no sólo será en las casas. El campeonato del mundo tiene que darnos pie para aprovechar una oportunidad única que no debemos dejar pasar de ninguna manera para la promoción de España, sus empresas, su oferta de negocios y su capacidad para reinventarse y posicionarse en el mundo en un lugar que nos ganemos a pulso.

En muchas ocasiones me he referido a los cambios y a la capacidad de innovación como motor del crecimiento empresarial. Y también a que el motor empresarial no funciona sin que haya quien lo arranque, lo mantenga en marcha y cuide de que esté en perfecto orden de funcionamiento y que una de las partes más importantes son las personas y su relación con la cultura empresarial. Creo que todos querríamos que nuestra empresa funcionase como lo ha hecho la selección para todas, absolutamente todas las personas que la componen.

Claro que podemos. Y el excepcional grupo de personas jóvenes, dirigidos por un cincuentón experimentado y respaldados por todo el grupo de trabajo, han sido capaces de dar la imagen de lo que debe ser nuestro objetivo: convertir nuestras organizaciones en un conglomerado heterogéneo que coopera, trabaja en grupo, en dónde la creatividad personal enriquece a todos y en el que el resultado del conjunto está por encima de las individualidades.

jueves, 8 de julio de 2010

El cuento de la palabra.


Anoche en la Casa de Abraham Señor, -supongo que inspirado por el fondo de los festejos por la victoria de España-, el narrador José Manuel Garzón, preguntó si había entre el público alguien que fuera del siglo XVIII, además de Ignacio Sanz.

La verdad es que mi mujer y yo estuvimos a punto y vimos a más de uno tentado de levantar la mano, porque no sé qué tiene la palabra, en esta forma de narración oral que engancha como un anzuelo y te sientes como la trucha que tira del sedal, herido pero sin posibilidad de zafarte, hasta que te rindes y dejas que el narrador te coja con su red, suavemente, con cariño. Y con delicadeza, casi con ternura, te quita de la boca ese anzuelo que escuece y te suelta otra vez en el río de sus palabras, y entonces nadas libre, aún con el escozor en la boca, a favor del río o a contracorriente, buscando el remanso del agua fresca o empujando con fuerza contra la chorrera que sale de su boca.

¿Qué tendrá la palabra?. ¿Qué magia tienen los gestos del que cuenta con los ojos, las manos, los pies y las cejas levantadas?. Será que nos llevan a la cueva, junto a la hoguera, con la boca abierta mirando al que habla y gesticula o en los brazos de la madre, intentando no dormirte mientras el calor del fuego te acuna.

Sera que a mi me transportan de vuelta al pinar, con mi abuelo Matías explicándome cómo se sube a un pino a por piñas. Cogiendo tila con mi abuela Fuencisla que me decía "¿Qué hay que tener" y yo contestaba "Paciencia, abuela, paciencia". En la cocina de casa, subido a un taburete, limpiando las lentejas una tarde de invierno mientras mi madre escucha los seriales de la radio.

Tener un acontecimiento como el Festival de Narradores Orales que ya va por la undécima edición es un lujo que nos podemos permitir, gracias a que existen personas como Ignacio y todos los que han ido pasando por la tarima en estos años que saben vivir y hacernos vivir a través del cuento.

¿Será, Ignacio, que a todos nos gustaría vivir del cuento; de este cuento?.

Programa del XI Festival de Narradores Orales.